Cuando eres pequeño no es raro bañarte con algún amigo o amiga, pero de grande estas cosas ya no se hacen a no ser que quieras follar. Estas dos amigas lo intentaron, se quisieron dar una ducha juntas pero estaba claro lo que iba a pasar, más con dos viciosillas como ellas. Al final la ducha acabó siendo un polvazo entre amigas tremendo.