Se pensaban que la madre no estaba en casa y la hija y el novio se pusieron a follar en la cocina en un calentón repentino. La madre se quedó flipando pero no pudo evitar ponerse cachonda viendo la escena y se empezó a tocar mirándoles hasta que ya no aguantó más y entró en la cocina. Les pidió de participar y tanto a la hija como al novio les parecí de puta madre... Nunca mejor dicho, jejeje.