La repartidora de periódicos no pudo llegar en mejor momento. El chico estaba haciéndose una paja mirando una película porno y justo la chica llamó al timbre. El chico la invitó a pasar y tomarse algo con él y ella al ver en la pantalla la película, también se calentó. Un chico y una chica calientes y a solas en casa, esto no podía acabar de otra manera que con una buena follada y así es como acabó.