Mi novio cumplía los 40 este año y quise hacerle algo innovador y que no olvidase nunca, ya que esta edad es complicada. Así que en vez de hacerle o comprarle una tarta decidí ser yo su tarta. La cosa fue sencilla, me llené el cuerpo de caramelo y virutas de chocolate. Además de quedarme muy rico estaba súper sexy!