Estaba cachonda y me tumbé en el sofá para masturbarme, estaba ahí en plena faena cuando llegó mi cuñado y me pilló. No dejé de hacerlo, estaba tan cachonda que me dio igual que el hermano de mi chico estuviera allí, es más, pensé que si lo calentaba a lo mejor me acababa echando un polvo y todo... Y no me equivocaba.