Mis fiestas de pijama siempre son y serán las mejores. Cuando las monto siempre utilizo el mismo modo: Primero nos vamos a bañar a la playa y después llegamos a casa muy calientes con ganas de seguir jugando, así que sacamos nuestros vibradores y nos damos placer mientras nos grabamos. Somos la envidia de toda el barrio, ya que todos los tíos nos desean.