Parece que la señora Sara Stone necesita dinero, había pensado en empeñar el reloj que le regaló su marido el día de la boda pero se lo piensa mejor, es algo que no puede perder así que decide algo más radical y no es otra que empeñar su coño, si amigos, el jefe de la casa de empeños accede a prestarla el dinero a cambio de su coño.