La rubia llevaba un par de fajos de billetes encima que no son normales, además no podía justificar como los había ganado, así que no sería haciendo nada bueno. Se le venía una multa grande encima, a parte de perder el dinero o incluso algo peor como unos meses de cárcel. Pero está muy buena y en el cacheo al quedarse desnuda el policía se quedó loco con ese cuerpazo. Al final quizá podían llegar a un acuerdo que les dejara contentos a los dos...