Esta refugiada árabe no tenía donde pasar la noche, el caso es que la llevé a casa y me sorprendió lo que me dijo, la cabrona llevaba meses sin sexo así que casi me suplicó que le gustaría darse una ducha y hacerme una mamada .., joder, no me lo creía la verdad pero que coño, una mujer árabe es muy ardiente como me demostró.