La hermanastra es muy zorra y el es un hombre, no hace falta decir mucho más. La chica le tira la caña a su hermanastro y él, como es lógico, no puede decirle que no a una jovencita preciosa como esta, por mucho que sean familia. Así que el chaval le repasa el conejo a cuatro patas hasta que se termina corriendo dentro de su chocho.